sábado, 15 de diciembre de 2012

¿Cómo explicar estas tragedias?


                                                                                                                   

Raul Lopez-Perez

Ya lo afirmé la pasada semana cuando comentábamos la oposición de algunos  a que se invocara a Dios al comienzo de las sesiones de  la Comisión de la Ciudad de Miami:  "Vacío de Dios".

Es la ausencia  de Dios en nuestras vidas la causa principal de la violencia, de las drogas, de la corrupción,   de tantos males que sufre nuestra sociedad.   Hemos sacado a Dios de nuestras vidas y lo hemos sustituido por un extremo materialismo, por una sociedad laical.

También contribuye a agravar los males la excesiva facilidad para obtener las armas. Es cierto que la Constitución nacional lo permite.  Pero también es cierto que la Constitución es complementada y regulada por leyes, como las leyes son  reguladas por  los reglamentos.   Se debe legislar para que cumpliendo con la Constitución se pueda comprar armas, pero también  regular la prohibición de  compra de armas de guerra, regular la cantidad de armas, regular las condiciones para comprarlas. Si regulamos como obtener una  licencia para conducir  vehículos, igualmente podemos regular las condiciones psíquicas y morales para la tenencia de armas.

"Señor",  dale luces a nuestros legisladores  y gobernantes  para conducirnos a una sociedad pacífica y edificante.  "Moral y Luces", como decía el Libertador Simón Bolivar.  "Señor",  danos  luces a todos para re encontrarnos contigo, para procurar el bien, para proteger la vida, para amarnos como hijos tuyos.