VENEVISION CON VENEZUELA
VENEVISION –como la mayoría de los medios de comunicación social, pero posiblemente mucho más que los otros medios- ha mantenido tradicionalmente una conducta equilibrada e imparcial respecto al gobierno y la oposición, brindándoles espacios de opinión y noticias ponderadas, todo ello en un marco de defensa a la libertad, la democracia y la libre empresa.
Fue durante este gobierno, caracterizado por la confrontación, el irrespeto, la ofensa, la amenaza y la burla a sus presuntos adversarios, cuando Venevision y casi todos los medios, además de los partidos políticos, los organismos empresariales, los gremios laborales, la Iglesia y la sociedad civil en general se lanzaron a una gran campaña contra el gobierno que los adversaba, concluyendo estas acciones en protestas masivas, una huelga general, el uso de la violencia por parte del gobierno, un vacío de poder y un gobierno provisional de un día, seguido de una recuperación del poder por parte del Cor. Hugo Chávez Frías, quien prometió no utilizar más el uniforme y buscar la conciliación, lo cual olvido a las pocas semanas.
Hubo un resultado peor con la muerte de muchos venezolanos por parte de quienes hoy aparecen como víctimas siendo victimarios -la historia la escriben los vencedores-, el cierre de miles de empresas, aumento del desempleo, desabastecimiento, revanchismo, y mayor clima de inseguridad y desconfianza, con deterioro y debilitamiento de las instituciones representativas y los medios.
Se requería un tiempo de recuperación y los dirigentes empresariales propusieron inclusive en asambleas de los gremios volver a la neutralidad y propiciar un clima de entendimiento y de conciliación. Así lo hicieron empresarios grandes, medianos y pequeños. Lo hicieron algunos medios y lo hizo Venevision.
En medio de esta situación, llega la fecha de renovación de los permisos de concesión por parte del Estado a las empresas Radio Caracas TV y Venevision, y el próximo año a Televen. Venevision dedicó su Dpto. Legal y buena parte de sus ejecutivos a estudiar la nueva Ley Orgánica de Telecomunicaciones liderizada por el presidente de CONATEL, Diosdado Cabello, que si fue una ley verdaderamente concertada y que mereció los elogios de las mayorías. Inclusive en la asamblea de FEDECAMARAS celebrada en Maturín, la Cámara de Telecomunicaciones la presentó como un modelo de entendimiento gobierno-empresa privada. Los estudios realizados por Venevision concluían que habia que tramitar la renovación mediante la transformación/adecuación al marco de la nueva ley, de ciertos requerimientos y alertó a sus colegas de RCTV y Televen, proponiendo estrategias similares. Marcel Granier, a nombre de RCTV opinó que ellos no tenían que cumplir con esos requisitos, ya que la renovación seria automática. De allí ambas empresas siguieron estrategias distintas y separadas.
La situación se complica porque en medio de esta coyuntura el gobierno aprueba nuevas leyes y reglamentaciones, como la Ley Mordaza, entre otras, que no son concertadas y que si limitan el campo de la libertad de opinión y prensa. Algunas empresas se radicalizan como entes oposicionistas a ultranza, otras se vuelven más cautelosas y se imponen auto-censura, entre ellas Venevision.
Desde luego que si por el gobierno fuera, probablemente no renovaba las concesiones de Radio Caracas, ni de Venevision ni de otras muchas emisoras radiales y de TV. Pero si éstas cumplen con todos los requerimientos es muy difícil que les nieguen la renovación. Si no cumplen con lo que ordena la propia ley, se exponen a que le nieguen la renovación y esto fue el caso de Radio Caracas TV.
RCTV y Marcel Granier se convierten en héroes, luego en mártires, mereciendo los aplausos y reconocimientos universalmente. Y la gran mayoría del pueblo dejo de ver RCTV. Vale la pena reflexionar y preguntarse si ello pudo evitarse.
Por parte de Gustavo Cisneros, antes mas admirado, hoy detestado por muchos, con humildad, sinceridad y valentía, se presenta a aceptar y corregir los errores que también ha cometido Venevision, proclamando su imparcialidad para beneficio no del gobierno ni de la oposición, sino de Venezuela. Felicitamos a Gustavo Cisneros, el “empresario global”. Venevision vuelve as ser el canal del entretenimiento y de la información veraz e imparcial.
Bartolomé Pérez.
VENEVISION –como la mayoría de los medios de comunicación social, pero posiblemente mucho más que los otros medios- ha mantenido tradicionalmente una conducta equilibrada e imparcial respecto al gobierno y la oposición, brindándoles espacios de opinión y noticias ponderadas, todo ello en un marco de defensa a la libertad, la democracia y la libre empresa.
Fue durante este gobierno, caracterizado por la confrontación, el irrespeto, la ofensa, la amenaza y la burla a sus presuntos adversarios, cuando Venevision y casi todos los medios, además de los partidos políticos, los organismos empresariales, los gremios laborales, la Iglesia y la sociedad civil en general se lanzaron a una gran campaña contra el gobierno que los adversaba, concluyendo estas acciones en protestas masivas, una huelga general, el uso de la violencia por parte del gobierno, un vacío de poder y un gobierno provisional de un día, seguido de una recuperación del poder por parte del Cor. Hugo Chávez Frías, quien prometió no utilizar más el uniforme y buscar la conciliación, lo cual olvido a las pocas semanas.
Hubo un resultado peor con la muerte de muchos venezolanos por parte de quienes hoy aparecen como víctimas siendo victimarios -la historia la escriben los vencedores-, el cierre de miles de empresas, aumento del desempleo, desabastecimiento, revanchismo, y mayor clima de inseguridad y desconfianza, con deterioro y debilitamiento de las instituciones representativas y los medios.
Se requería un tiempo de recuperación y los dirigentes empresariales propusieron inclusive en asambleas de los gremios volver a la neutralidad y propiciar un clima de entendimiento y de conciliación. Así lo hicieron empresarios grandes, medianos y pequeños. Lo hicieron algunos medios y lo hizo Venevision.
En medio de esta situación, llega la fecha de renovación de los permisos de concesión por parte del Estado a las empresas Radio Caracas TV y Venevision, y el próximo año a Televen. Venevision dedicó su Dpto. Legal y buena parte de sus ejecutivos a estudiar la nueva Ley Orgánica de Telecomunicaciones liderizada por el presidente de CONATEL, Diosdado Cabello, que si fue una ley verdaderamente concertada y que mereció los elogios de las mayorías. Inclusive en la asamblea de FEDECAMARAS celebrada en Maturín, la Cámara de Telecomunicaciones la presentó como un modelo de entendimiento gobierno-empresa privada. Los estudios realizados por Venevision concluían que habia que tramitar la renovación mediante la transformación/adecuación al marco de la nueva ley, de ciertos requerimientos y alertó a sus colegas de RCTV y Televen, proponiendo estrategias similares. Marcel Granier, a nombre de RCTV opinó que ellos no tenían que cumplir con esos requisitos, ya que la renovación seria automática. De allí ambas empresas siguieron estrategias distintas y separadas.
La situación se complica porque en medio de esta coyuntura el gobierno aprueba nuevas leyes y reglamentaciones, como la Ley Mordaza, entre otras, que no son concertadas y que si limitan el campo de la libertad de opinión y prensa. Algunas empresas se radicalizan como entes oposicionistas a ultranza, otras se vuelven más cautelosas y se imponen auto-censura, entre ellas Venevision.
Desde luego que si por el gobierno fuera, probablemente no renovaba las concesiones de Radio Caracas, ni de Venevision ni de otras muchas emisoras radiales y de TV. Pero si éstas cumplen con todos los requerimientos es muy difícil que les nieguen la renovación. Si no cumplen con lo que ordena la propia ley, se exponen a que le nieguen la renovación y esto fue el caso de Radio Caracas TV.
RCTV y Marcel Granier se convierten en héroes, luego en mártires, mereciendo los aplausos y reconocimientos universalmente. Y la gran mayoría del pueblo dejo de ver RCTV. Vale la pena reflexionar y preguntarse si ello pudo evitarse.
Por parte de Gustavo Cisneros, antes mas admirado, hoy detestado por muchos, con humildad, sinceridad y valentía, se presenta a aceptar y corregir los errores que también ha cometido Venevision, proclamando su imparcialidad para beneficio no del gobierno ni de la oposición, sino de Venezuela. Felicitamos a Gustavo Cisneros, el “empresario global”. Venevision vuelve as ser el canal del entretenimiento y de la información veraz e imparcial.
Bartolomé Pérez.