Abel Ibarra
Alá Akbar debe haber sido el grito con el que unos musulmanes modernos bautizaron la masacre emprendida recientemente contra un grupo de cristianos en Nigeria. Hombres, mujeres y niños fueron quemados vivos para mantener la tierra libre de “infieles” y, las fotos que circulan por Internet de los cuerpos calcinados, son el testimonio macabro de la barbarie desatada por ese culto asfixiante que ve enemigos en todo el que no acceda a seguir sus códigos de fanatismo y exclusión.
CONTINUA
http://www.blogger.com/blogger.g?blogID=1817192819230863852#editor/target=post;postID=3759849581215454888