LAURA FIGUEROA
Estaba sentada --hipnotizada-- entre los asistentes a Sábado Gigante.
Paola Espinosa ya había saludado a uno de los copresentadores del programa sabatino de variedades de Univisión, pero eso no fue lo que la alentó. Tampoco eran el reluciente escenario, las actuaciones o los atractivos vestidos de las modelos. En realidad sólo veía formas poco definidas y manchas de color.
Fue la energía tras bambalinas lo que cautivó a Espinosa, de 21 años. Podía sentir la energía del personal, los camarógrafos buscando la mejor posición. Podía escuchar el aplauso y la animada conversación entre el público.
Estar allí la recordó su sueño: asistir a la universidad para estudiar comunicaciones y medios.
continua
http://www.elnuevoherald.com/noticias/sur-de-la-florida/story/345733.html