jueves, 26 de julio de 2007

La reelección presidencial indefinida sería una "confiscación" de soberanía del pueblo


La reelección presidencial indefinida sería una "confiscación" de soberanía del pueblo

Porlamar, julio 25 (Lourdes Rojas).- El saliente presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), José Luis Betancourt, afirmó que la reelección indefinida del jefe de Estado significa "la confiscación de la soberanía del pueblo y el desconocimiento flagrante del principio de alternabilidad republicana".

Durante la instalación de la LVIII Asamblea de Fedecámaras, que se desarrolla en la Porlamar, isla de Margarita, Betancourt aseguró que la eventual incorporación de la reelección presidencial indefinida dentro de la reforma constitucional vulnera el principio universal de la igualdad ante la ley.

"Alertamos al país a cerrar filas en torno a la denuncia de este proyecto. A la exigencia inmediata de un debate con la participación de todos los sectores del país, para concretar y definir los alcances de esta reforma, que a todas luces nos resulta improcedente", comentó.

El presidente saliente de Fedecámaras expresó la honda preocupación que existe dentro del gremio empresarial frente a la decisión de Hugo Chávez de modificar el texto de la Carta Magna, especialmente si se plantea la modificación de valores fundamentales de la sociedad democrática, restricciones a la libertad de expresión, ideologización de niños y jóvenes, desconocimiento de la autonomía universitaria, politización de la Fuerza Armada Nacional, y la modificación de la organización político-territorial del país.

"Esta reforma va a modificar estructuralmente los parámetros de la democracia representativa que hoy por hoy son el soporte de nuestra convivencia social, y producirá la ruptura de las garantías individuales, sociales y económicas de los venezolanos para crear un Estado absoluto, autoritario, con libertades restringidas, en donde desaparecerá el estado de derecho que hoy conocemos", acotó.

Betancourt resaltó que sólo en una sociedad democrática se puede alcanzar un desarrollo que favorezca a todos los sectores del país.

"Libertad significa poder pensar sin censura, poder expresarse sin limitaciones, sin temores. Libertad significa tener todos los derechos vigentes y cumplir con los deberes. Poder emplearlos a plenitud para crear empresas, para crear bienes y servicios, para construir y producir, para servir al entorno y a la naturaleza con criterio e inteligencia", apuntó.

"(r)Cómo podemos llamarnos bolivarianos y renunciar a la libertad? (r)Cómo podemos ser bolivarianos y predicar la muerte y la violencia? El Libertador luchó para darle libertad a medio continente, no para quitarle la libertad a nadie", añadió.

El dirigente gremial reconoció la importancia de instituciones sólidas que establezcan reglas claras de convivencia, pero resaltó que los ciudadanos no deben vivir del Estado.

Durante su discurso aprovechó la oportunidad para destacar la actitud asumida por los estudiantes universitarios, quienes, según señaló, han dado una "extraordinaria demostración de frescura e inteligencia, llena de vida y compromisos.

Balance

Después de permanecer dos años al frente de la cúpula empresarial, Betancourt ofreció un balance de su gestión. Aseveró que desde el inicio de su período buscó crear espacios de comunicación con todos los sectores representativos del país y resaltó la importancia de la reunión que sostuvo con el presidente Chávez.

"Buscamos que con todas las diferencias que existían fuera normal reunirnos sin que ello indicara claudicar o declinar principios. Tarea nada fácil dada la altísima polarización existente. Ello generó un mensaje de apertura comunicacional hacia los demás estamentos de la República, tanto a nivel nacional, como estadal y municipal. Se produjeron acercamientos que aun continúan, y derribamos el mito de no poder hablar con quien nos considera su adversario", comentó.

"En un balance objetivo el resultado no ha sido el esperado, pues estoy convencido de que en un país democrático la comunicación entre el presidente de la República, su gobierno, y todos los sectores representativos del país, debe ser permanente y no ocasional", agregó.

El dirigente gremial cuestionó que, a pesar de los millardos de dólares que han ingresado a Venezuela gracias a la industria petrolera, este dinero no haya llegado a los hogares más pobres, y no se haya utilizado para la creación de empleos y propiciar el progreso social.

"La realidad nos dice que la principal aspiración de los venezolanos es la oportunidad de tener seguridad y empleo; que se produzca la inclusión social mediante empleo digno, estable y bien remunerado; que se generen las condiciones de nuevos empleos con la oportunidad de ser ciudadanos responsables, contribuyentes fiscales con el Estado, y que éste, a su vez, revierta el producto de la recaudación en mejor calidad de vida para nuestros compatriotas", apuntó.

"Para ser competitivos no basta tener el gran país que es Venezuela. Es fundamental la libertad de asociación, comercialización, financiamiento universal, intercambio de bienes y servicios y demás factores, en igualdad de condiciones. La educación, la infraestructura, la seguridad jurídica, la salud y la defensa nacional son funciones indelegables de gobierno, que compartidas con un sector privado eficiente constituyen la base de una gran nación", añadió.

Betancourt deploró que la delincuencia continúe azotando a los hogares venezolanos, y criticó que las autoridades no hayan podido hallar respuestas concretas.

"El tema ha sido politizado, y todo acto queda señalado como una suerte de lucha de clases, cuando la verdad simple y pura es que la corrupción y los abusos están a la vista de todos. El índice de secuestros, asesinatos, invasiones, afectaciones, robos y vandalismo, supera todas las referencias históricas", acotó.

También lamentó que voceros del Estado acusen al empresariado de ser responsable de algunos problemas de la economía nacional, como el desabastecimiento.

"(r)Cómo cultivar o criar, como producir, manufacturar y comercializar, como aprovechar nuestras potencialidades turísticas, la minería y los servicios, con semejante inseguridad personal y patrimonial? El gobierno no atiende las razones de los actores productivos venezolanos. Opta por importar una fórmula que beneficia a la economía del país exportador, pero destruye dolosamente la producción nacional", anotó.