MANUEL CORAO:
Cuando observamos la política de ocupación temporal y definitiva de empresas por parte del gobierno venezolano y creyendo que la iniciativa es para evitar la especulación y acaparamiento de productos básicos e insumos de la dieta de los venezolanos, le damos nuestro apoyo como medida transitoria ejemplar. Pero pronto, muy pronto nos damos cuenta de que tanto tal iniciativa como nuestro fugaz encanto forman parte de una bien trazada estrategia que tiene como fin político convertirnos con el tiempo en pedigüeños.
El sector privado de la economía era una segura fuente de trabajo para la población laboralmente activa, mientras la diferencial era incorporada a la clase burócrata del país.
Para tener influencia mandataria en el colectivo, Hugo Chávez tiene que revertir esa proporción incorporando nuevos conceptos a la nomenclatura: Aliados del proceso, Enemigos del régimen y Sobrevivientes.
Desde 1999 se inicio un proceso de captación de empresarios bajo la oferta de pingües regalías que les permitió a los comunistas conocer las sociedades mercantiles agrupadas y realizar un censo cuya data utilizarían posteriormente. Hay quienes se ufanan de ganar mucho dinero y que nada pasa en Venezuela, cuando en realidad es una suerte de espejismo para que no vean más allá; la dictadura.
Luego de la intervención en años recientes de las compañías, entre estas del café y cemento, el Instituto de Estudios Superiores de Administración –IESA– realiza una evaluación y en un informe titulado "Gestión en rojo:
http://www.elnuevoherald.com/2011/08/25/1011023/manuel-corao-mendigos-solo-mendigos.html#ixzz1WBUAklXX