En Caracas no hay hora punta. Si no hay trancadera, está a punto de formarse. Todos tratan de escapar buscando alternativas, callejeando, pero es algo inevitable, tarde o temprano, la fila de autos en frente es inevitable.'
No es raro subirse a un taxi y que el conductor advierta: vamos, pero con paciencia señor porque está trancado. Se trata del medio ambiente cotidiano con el que conviven los conductores: filas y más filas.
Para desespero de "casi todos", porque a cualquier medio ambiente, hay unos que se adaptan mejor que otros. En la capital venezolana estos son los vendedores ambulantes, quienes han hecho del atasco su modo de ganarse la vida.
A pie de carretera venden casi cualquier cosa. Desde cargadores para celular que a más de uno ha salvado de no perder una importantísima llamada hasta chucherías o juguetes. Bien parece que los padres desesperados por entretener a sus hijos son el cliente ideal.
http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2012/12/121220_video_caracas_venendores_ambulantes.shtml
