Los Padres Fundadores de Estados Unidos no diseñaron un modelo de gobierno siguiendo el formato parlamentario inglés. James Madison, el principal autor de nuestra Constitución, no quería que un presidente en funciones fuera destituido por una decisión presidencial poco popular. “Para eso sirven las elecciones cada cuatro años”. El sistema de controles y frenos entre el ejecutivo y el poder legislativo impondrá los ajustes necesarios. El presidente solo puede ser despedido de su función constitucional por cometer un crimen; encausado por la Cámara Baja y enjuiciado por el Senado de EEUU.
En la Florida un gobernador en funciones no puede ser destituido por petición. En la mayoría de los 50 estados y en las ciudades importantes, no se puede destituir a un gobernante a no ser que lo encuentren culpable de un delito. La carta constitucional de Miami-Dade es de las pocas en Estados Unidos que no ofrece esa condición legal de salvaguardia.
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