martes, 9 de septiembre de 2008

Finlandia, un ejemplo para Latinoamérica


Finlandia, un ejemplo para Latinoamérica

Al igual que otros muchos periodistas extranjeros, hice mi peregrinación a Finlandia para averiguar cómo hizo este país para trepar a los primeros puestos de los más importantes rankings internacionales que evalúan el éxito social, económico y político de las naciones. La respuesta, me enteré, es sorprendentemente simple.
Empecemos por los datos concretos. Finlandia ocupa el primer puesto entre 179 países en el índice anual de Transparencia Internacional sobre las naciones menos corruptas del mundo (EEUU ocupa el puesto número 20); también está en el primer puesto en el ranking de los países más democráticos del mundo de Freedom House (EEUU esta en el puesto número 15); figura en el primer puesto en los exámenes internacionales de ciencia realizados por estudiantes de 15 años (EEUU está en el número 29), y está entre las 10 economías más competitivas del mundo según el Foro Económico Mundial (EEUU encabezó esa lista este año).
Un país pequeño, con tan sólo 5.3 millones de habitantes, que hace apenas dos décadas era el más pobre del norte europeo, Finlandia también puede jactarse de ser la sede de la empresa de celulares más grande del mundo --Nokia-- y de tener las empresas papeleras y de pulpa más innovadoras del planeta.